Acaso te preguntes si esa caries, que cada vez se hace más grande, tiene arreglo. Tal vez una muela se te haya roto o hayas atravesado por episodios reiterados de dolor intenso en alguna pieza dentaria. Incluso, quizás hayas advertido algún punto de supuración en la zona vecina de la encía. Es posible que temas perder esa pieza o creas que curarla implicará enfrentar un tratamiento muy largo, de muchas sesiones.
Si algo de esto te ha sucedido, consulta con nosotros, es probable que podamos ayudarte y puedas resolver eso que te preocupa, en sólo un par de sesiones. Hoy existen los materiales y las técnicas que permiten dar solución a esta clase de situaciones en una cantidad mínima de sesiones. Sólo se trata de realizar un buen diagnóstico y una adecuada planificación del tiempo invertido. ¿De qué manera se lleva a cabo?
En la primera sesión, se controla la infección mediante la realización del tratamiento de conducto, se prepara el diente para recibir la restauración protética que necesita y se toma la impresión para que el laboratorio pueda confeccionarla. A continuación, el paciente regresa a su casa y a la vida, con una restauración provisoria.
En la segunda sesión, sencillamente se instala la restauración elaborada por el laboratorio a través del método CAD-CAM. Y listo, dos sesiones y ¡a morder!